Bombas de calor en edificios nuevos y antiguos

Una bomba de calor aprovecha la energía natural de un modo especialmente eficaz y respetuoso con el medio ambiente: la energía se extrae del aire ambiente, el suelo o las aguas subterráneas mediante un intercambiador de calor y, en un circuito de bomba de calor, se eleva a un nivel de temperatura útil para la calefacción. Al utilizar esta energía gratuita de la naturaleza, ya no dependerá del petróleo ni del gas. Además, la inversión se amortiza en pocos años.

Cuando se trata de elegir el sistema de calefacción adecuado para una nueva construcción, los constructores apuestan cada vez más por las bombas de calor. Según la Oficina Federal de Estadística, el 32% de todos los edificios residenciales terminados en 2016 estaban equipados con una bomba de calor. Esta evolución refuerza el malentendido de que las bombas de calor solo son adecuadas para edificios nuevos, lo cual no es del todo correcto. En determinadas condiciones, el uso de una bomba de calor en un edificio antiguo también puede merecer la pena.

Bombas de calor en edificios antiguos

Las nuevas bombas de calor alimentadas por aire Vitocal 250-A y Vitocal 252-A facilitan la modernización de los sistemas de calefacción incluso en casas antiguas. Las innovaciones incluyen el refrigerante especialmente respetuoso con el clima, el sistema hidráulico patentado y la nueva plataforma electrónica con Viessmann Energy Management.

Se pueden seguir utilizando los radiadores existentes

El Vitocal 250-A se ha diseñado como un aparato mural que ahorra espacio, mientras que el Vitocal 252-A es un aparato compacto de pie con un depósito de ACS integrado de 190 litros. Los aparatos, que se han desarrollado especialmente para la modernización de sistemas de calefacción en viviendas unifamiliares y bifamiliares, funcionan de forma convencional con el refrigerante R290 (propano), que es extremadamente respetuoso con el clima en comparación con los refrigerantes utilizados en otras bombas de calor.

Este refrigerante también permite a las nuevas bombas de calor alcanzar altas temperaturas de flujo de hasta 70 grados centígrados, incluso cuando en el exterior hay menos 15 grados centígrados. Por lo general, es posible seguir utilizando los radiadores existentes. No es imprescindible instalar calefacción por suelo radiante, lo que ayuda a mantener dentro de unos límites los costes del proyecto de modernización.

Instalación que ahorra costes gracias a un sistema hidráulico innovador

El ahorro de costes también está garantizado si se sustituye una bomba de calor existente por una de las nuevas que cuenta con el sistema hidráulico patentado Hydro AutoControl. Éste se adapta a prácticamente todos los sistemas de calefacción existentes durante la modernización y reduce significativamente el tiempo de instalación en comparación con otras bombas de calor. Además, el sistema hidráulico contribuye a reducir en dos tercios el espacio necesario para el sistema.

Bombas de calor en edificios nuevos

Los edificios nuevos suelen tener buenos valores energéticos y una demanda de calor correspondientemente baja. Por lo general, para la calefacción central se utilizan modernas calderas de condensación que funcionan con un alto rendimiento en el rango de temperaturas de 35 a 50 grados centígrados. Las bombas de calor también son uno de los sistemas de calefacción más utilizados en las nuevas construcciones. Las razones son obvias: las bombas de calor alcanzan los mayores niveles de eficiencia en los edificios nuevos. Además, parte de la demanda de energía primaria de los edificios nuevos debe cubrirse con energías renovables, lo que se consigue fácilmente con una bomba de calor.

Con diferencia, la unidad exterior más silenciosa de su clase

La nueva unidad exterior Vitocal tiene un acabado y una calidad de producto excelentes. Impresiona por su funcionamiento silencioso gracias a su avanzado diseño acústico. Estas unidades son especialmente adecuadas para zonas densamente edificadas.

Funcionamiento de las bombas de calor con un sistema fotovoltaico

Un sistema fotovoltaico también es una buena forma de aprovechar la energía gratuita del medio ambiente. Los sistemas fotovoltaicos absorben la radiación solar con la ayuda de un absorbedor, antes de convertir la energía solar en electricidad. Dependiendo de la orientación, el tipo de colector y la radiación global, un sistema fotovoltaico puede cubrir gran parte de la demanda de electricidad de una vivienda. Cuando se combina con una bomba de calor, la electricidad solar puede utilizarse para el proceso del circuito de refrigeración. Esto ayuda a que los usuarios del sistema sean un poco más independientes de sus proveedores de electricidad. Además, esta combinación significa calor casi totalmente libre de carbono, lo que es estupendo para el medio ambiente. La propia bomba de calor dispone de una función inteligente de optimización fotovoltaica, que aprovecha al máximo la energía solar autogenerada.

La combinación de bomba de calor y energía fotovoltaica también puede ser útil para los propietarios que deseen alcanzar el estándar de una casa de bajo consumo energético. Esto se debe a que la Ordenanza Alemana de Ahorro de Energía (EnEV) permite deducir la energía autogenerada del cálculo de la demanda final de energía. Esto reduce la demanda anual de energía primaria y hace que los propietarios puedan optar a atractivas subvenciones públicas para bombas de calor en viviendas de nueva construcción.

Independientemente de si la bomba de calor se utiliza en un edificio nuevo o antiguo, para garantizar un funcionamiento fiable y económico a largo plazo, el sistema de calefacción debe ajustarse lo más posible a la demanda de calor. En la sección titulada Adquisición de una bomba de calor se explica en qué deben fijarse los propietarios de viviendas a la hora de plantearse una compra de este tipo.

Ventilación mecánica con recuperación de calor

Para quienes viven y trabajan en espacios interiores cerrados, el intercambio controlado de aire es esencial. La ventilación mecánica controlada garantiza un clima ambiental agradable, reduce las pérdidas de calor por ventilación y disminuye los costes de calefacción. Las unidades de ventilación recuperan hasta el 98% del calor latente del aire extraído y lo utilizan para calentar el aire exterior entrante. Cuando se combinan con una bomba de calor Vitocal, se convierten en un completo sistema de aire acondicionado.